Onda Cero - Más de uno Luarca 20/02/2024
La alcaldesa Navia, Ana Fernández, se ha mostrado “escéptica” sobre el futuro del espigón de la ría de Navia, al término de una reunión con el consejero de Fomento Alejandro Calvo, quien le participa la realización de una reparación de urgencia valorada en 166.000 €. No se acometerá una obra de rehabilitación y consolidación de la infraestructura en el mejor de los tiempos hasta el 2025.
La regidora señala que al escepticismo se añade el “temor” de cómo se va a desarrollar la obra. Primeramente, Calvo, le adelanto que realizaran los trabajos “de urgencia” de reparación, que pasan por recolocar las rocas que se dispersaron por el canal de navegación y la playa. Reforzar en una segunda fase el dique mediante la instalación de unas 5 toneladas de rocas y arreglar la base del muro y la zona superior que está rota.
El presupuesto para esta actuación es de 166.000 €, afirmando Calvo a la regidora que no hay partida para acometer una reconstrucción del espigón, tal como demanda Fernández, “lo único que se puede hacer es una reparación de urgencia”.
Le confirmo que había una serie de “propuestas” para la reconstrucción y que tendrán que ser sometidas a la consideración del departamento de Costas, al ser otro actor interviniente, según el consejero, quien además será el que determine la propuesta “más adecuada y si es necesario más o menos”, para solucionar el problema.
Estas propuestas no fueron mostradas a la mandataria en la reunión, pesé haberlas solicitado para su análisis. Dice que ya es complicado cuando tiene que intervenir una administración y con dos crece aún más el recelo “por si tienen que hacerlo las dos así escurren el bulto”.
Termina diciendo que no creen en las palabras y sí en los hechos, por lo que ha demandado un calendario de trabajo para los avances que puedan surgir.
Calvo, le ha dicho que hasta no incluir una partida en los presupuestos del año 2025 no podrán hacer nada seguro. Fernández, cree que “se sigue tirando el dinero con reparaciones puntuales” y que ya tienen “el agua al cuello” por lo que reclama una solución definitiva.