La configuración de La Poza actual se inició, segun fuentes consultadas, aproximadamente en la década de los 40, coincidiendo con el inicio de la antigua escollera de piedra (parte de ella sigue existiendo actualmente).
La naturaleza se encargó de estructurarla y dárnosla completamente formada y separada de la mar. Así continuó enriqueciendo su entorno ecológico hasta que, con motivo de una construcción importante, una empresa se le autorizó a suministrar muchos metros cúbicos de áridos de todo el perímetro exterior. Esta obra ya dejó una huella sensible que se observa hasta el día de hoy.
A principios de siglo XXI, la configuración de La Poza, sobre todo en la zona próxima a la escollera, ya tenía un estado diferente al anterior: con menos profundidad de agua en general y, sobre todo, en la zona de comunicación con la Ría en todo su recorrido. Se iba apreciando, que en mareas muertas, al haber menos nivel de agua en la zona de la ría, junto con un nivel más alto de arena, la comunicación de la Ría con La Poza a través de la escollera, hacía que el flujo del agua fuera más lento. Al mismo tiempo la biodiversidad se fue viendo cada vez más afectada por lo citado anteriormente, hasta casi hacerla desaparecer.
2002 aprox.
Aproximadamente, en el 2014/15, se dotó, segun estudios de los técnicos de una mejor cimentación a toda la escollera, dejándola sellada; por consiguiente, sin la comunicación de agua, que la misma naturaleza mantenía hasta el momento. Posteriormente, al comprobar que la comunicación de agua era casi inexistente, se colocaron una serie de tuberías comunicantes que, en poco tiempo, demostraron su ineficacia para conseguir un flujo de entrada-salida lo más similar al anterior. Esto produjo una colmatación de arena que tapo esta zona casi por completo.
Con motivo de la reparación del espigón, al iniciarse los trabajos de reparación del mismo, se agravó más la situación de La Poza. Se necesitó hacer unos accesos para los camiones, pasando por los restos de la escollera de separación interior, utilizando zahorra, lo que produjo el tapado total de la escollera.